Y la maleta sin hacer
Published jueves, mayo 04, 2006 by la abiñoca.
Me encontré a
Javi, mi vecino al que cuidaba, sentado en la puerta del colegio. Con una pierna escayolada y dos muletas. Me dijo que tenía fisura del peroné, se la hizo ayer mientras corría por el patio,
donde cambia el suelo de la cancha por ése de cuadritos, justo ahí. No tenía nada mejor que hacer aunque me esperaban en casa para comer, así que me senté a esperar con él hasta que vinieran a buscarlo. Me dijo que tenía pinta de estar pensando en algo y me preguntó si seguía preocupada por lo de Venecia. Le dije que había llegado a la conclusión de que Venecia me esperaría y que, de todos modos, seguro que no huele muy bien allí. Entonces le conté la historia del piso, o de la ausencia de él.
- Tu casera es una zorra y tu amigo un cabrón
- No deberías hablar así. Pero tienes toda la razón del mundo. Y repito, no hables así.
A Javi le parece
súper genial eso de trabajar en un McDonalds y tener al alcance tanta comida. Me admira porque dice que, por ejemplo, él no sabría pedir una hamburguesa sin pepinillos.
- No me gustan los pepinillos
- Ni los yogures de macedonia, siempre me los comía yo para que tu madre no te riñera
- Te acuerdas
- Claro
- Si vuelves podrías darme clase
- ¿De qué?
- Ya se nos ocurriría algo. ¿Sabes hacer raíces cuadradas a mano?
- Creo que me acordaré
- También podríamos pasar las tardes viendo pelis. ¿Has visto Ice Age 2?
- Mejor la primera
- Completamente. Ya está ahí mi madre
- Tira. Y Javi, pepinillos son gherkins
- Without gherkins, please?
- Perfecto
