Ventana regalo de Bea, para que no me hagan falta las gafas para ver las estrellas. Desde que le pedí recomendaciones de jazz a lápiz en un sobre, me manda una pieza al día al correo. Los temas de jazz se han convertido en una estupenda manera de medir los días para mí. Ella también cuenta así un poco sus semanas. Supongo que también las contará por las veces que llena su pizarra cosmológica.

***

Cuando hace mucho frío me calo el gorro hasta las orejas y tengo que alzar la cabeza para poder ver andando por la calle. Entonces me siento un poco como Aguirre y canto al son de una guitarra en miniatura escondida en mi bolsillo.

***

Lo primero que veo cuando me levanto y mi mayor motivo de alegría. Postales de mi tierra, de mi segunda tierra, de sitios que conocí, de sitios que quiero conocer, de mi país, de países lejanos, de otros continentes. Postales de familiares, amigos y blogueros (gracias Aylén, Dju, Guajuca, Loca y LR)

***

S. mandó un CD con los nuevos discos de Falete y Mercé, y una carpeta llena de vídeos para reír a carcajadas en el salón. Fue como si me pintaran el cielo de colores y yo le toqué las palmas a la aspiradora esa tarde para que bailara.
Ya hablé en su día de Falete y de Quintero, cuando todavía andaba en Canal Sur. A mí Falete me cayó bien cuando le escuché eso de que era defensor de lo maricón y que desde que era famoso ligaba más. Me gusta la gente que habla así. Claro. Me gusta también su versión de Al que me siga o su homenaje a Sevilla, porque por muy Sevilla que sea, que una voz como la suya le cante no deja de ser un homenaje.

***

Powered by Castpost

Mercé, más sensual que nunca