<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar/8682120?origin\x3dhttp://elblogdebea.blogspot.com', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>



sin contar los sonetos, las coplas, los epistolarios



Me coso la boca. En ese silencio está la esencia de mí. La obsesión por precintar mi caja de los truenos, porque son míos. Porque perderían su sentido fuera. Arriba, en el cielo. Rompiendo la noche y haciendo vibrar ventanas. Para volver a fingir que me dan miedo las tormentas.

Porque no hay nada que decir. O ya está todo dicho. O no apetece. Porque todo acabó antes de empezar. Quizás escribiese The End antes de tiempo. El fin justifica los medios – dicen -. Sigo sin medios para justificar un fin, aunque sea mío.

Porque en el Sur el Verano se arrastra hasta entrado el Otoño. Y ya me he quemado la piel demasiadas veces. Porque tengo ganas de mirarme los pies y no ver arena. Quizás un abismo de unos metros entre ellos y el suelo. Piedra. Aunque luego busque restos de playa en mis bolsillos.


[Resumiendo, que tengo un cajón de la firma Pandora]

0 comentarios

  • albinioca en gmail









ATOM 0.3


Weblog Commenting and Trackback by HaloScan.com